La próxima vez que vayas a un restaurante, un bar, o una tienda donde haya empleados, juega a adivinar quién es el dueño.

Vas a ver que enseguida lo notas.

En cómo camina. En cómo mira. En cómo se mueve.

Su actitud es otra, su vibra es diferente, y mientras más lleno esté el lugar, más se nota.

Y luego piensa, ¿cuál es la diferencia entre un empleado común y ese cabrón que está al mando?

Si los dos van vestidos igual, tienen edades parecidas… y hasta puede que hagan lo mismo.

La única diferencia está en lo que traen en la cabeza, en lo que creen que son.

Es su mente la que ajusta su actitud.

Ahora imagínate por un momento que un mesero se creyera el dueño.

Que aunque fuera el más jodido del local, se sintiera como el propietario del negocio.

¿Sabes cómo se movería?

¿Cómo actuaría?

Exacto, como si fuera el dueño.

¿Y sabes cuánto le gustaría eso a los clientes? Un chingo.

¿Y sabes cuánto le gustaría al dueño? Un chingo y medio.

¿Y sabes qué más? Que seguro le darían un ascenso.

Y si mantuviera esa actitud, con el tiempo, y no sé si en ese lugar o en otro, pero acabaría siendo dueño.

Si lo piensas bien, hace sentido.

Porque si quieres ser dueño, pero todavía no lo eres, ¿qué es lo único que está 100% en tus manos?

¿Qué es lo único que puedes tener de dueño? La actitud.

Eso ajusta tus movimientos, tu vibra, y la vida se va colocando detrás para hacer match natural con el resultado.

Y ahora lleva esto a tener mucho dinero.

O a estar con la persona que te gusta.

O a manejar el carro con el que tantas veces has soñado.

Es lo mismo. El placebo eres tú, está en tu mente.

La hipnosis solo es una forma de hacerlo, de llevarte a dueño siendo mesero (en tu cabeza), para terminar siendo dueño (en la realidad).

De llevarte a ese auto, cuando no lo tienes, para terminar manejándolo. De esto trata.

De darte chance de vivir eso, porque muy pocos se la dan.

Ah, sobre tu hipnosis.

Por ahora no estoy haciendo más.

Bueno, sí, pero solo a quienes forman parte de Mental Magnet.

Hoy, las inscripciones ya están cerradas, pero prometo avisarte si abro nuevos cupos.

Además, armé un grupo de Telegram (en WhatsApp me silenciaron) en el que comparto algunas ideas sobre esto de jugar a ser quien se te pegue la gana (para terminar siéndolo).

También avisaré por ahí cuando vuelva a estar produciendo hipnosis.

Si te interesa, pícale aquí:

Un saludo,

Julián